Por aproximadamente 45 minutos permanecieron reunidos la subsecretaria de Estado de los Estados Unidos, Wendy Sherman y el presidente Luis Abinader, donde la problemática haitiana fue el principal tema abordado por ambas partes.
De acuerdo con declaraciones del vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, el mandatario le ratificó a la subsecretaria que para la crisis sociopolítica que afecta a Haití no existe una «solución dominicana» y que la intervención internacional es primordial para la mejora de las condiciones de la vecina nación.
«(El presidente) compartió con la subsecretaria Sherman el gran peso en nuestro presupuesto, principalmente en el de salud, la solidaridad practicada a diario por la República Dominicana. Repitió el presidente, que para un país en vía de desarrollo como la República Dominicana, lleno de problemas, no se le puede exigir ni pedir más», exclamó Homero, al conversar con la prensa al término de la reunión.
Al ser cuestionado por los periodistas, el vocero manifestó que la reacción de Sherman ante el replanteamiento de Abinader fue «positiva» y que la misma le recalcó al mandatario la posición de los Estados Unidos que es de ayudar a «construir ese consenso internacional, que permita ir a la ayuda de Haití».
Por su parte, el mandatario ha expresado ante varios organismos internacionales la necesidad de que sean otros países que busquen una solución a la crisis haitiana, en compañía de República Dominicana y que la misma no sea solamente del Estado dominicano.
Otros temas
Según lo expresado por el vocero del Gobierno, otros de los temas tratados fue la situación geopolítica internacional y que como «en un mundo cambiante en el 2023», las relaciones entre ambas naciones se mantienen sólidas.
Además, indicó que Abinader le agradeció a Sherman y al presidente de EE.UU., Joe Biden, por las palabras de elogio y reconocimiento a la «política anticorrupción» implementada durante su administración del Poder Ejecutivo, así como de «todos los esfuerzos que ha hecho el Gobierno Dominicano por transformar la cultura publica de la República Dominicana y elevar el estándar ético de la gestión pública».