El presidente de Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, planteó que bajo ninguna circunstancia el gobierno debe permitir que se disminuya la producción agrícola nacional, porque esa es la única manera de garantizar que los alimentos lleguen a toda la población dominicana.
Fernández, quien conversó sobre la seguridad alimentaria durante un Diálogo Popular Virtual con especialistas en el sector agropecuario y de la economía, hizo la advertencia ante la preocupación de uno de los participantes de que si la crisis sanitaria provocada por el COVID-19 se prolonga más allá de lo previsto, se pondría en peligro la seguridad alimentaria en el país.
“El gran desafío que tenemos es que aunque se prolongue la pandemia no podemos disminuir la producción agrícola”, expresó el candidato presidencial por la Fuerza del Pueblo y partidos aliados.
Dijo al respecto: “En caso de prolongarse la crisis sanitaria, tendríamos un problema a posteriori porque se caería la producción y el consumo porque la gente no tendría con qué comprar y por consiguiente ahí si podríamos entrar en la crisis alimentaria que tendríamos si hay una prolongación de la crisis. Ese es el escenario que más nos preocupa”.
El exmandatario escuchó las amenazas que asechan a este importante segmento responsable de suplir productos alimenticios a la sociedad dominicana y explicó que se debe proteger y estimular a los productores agropecuarios nacionales para garantizar la producción de alimentos que demanda la población.
Al manifestar su preocupación respecto al tema, el tres veces presidente de la República dijo que el sector agropecuario tiene un impacto importante en la economía dominicana y en el sustento de las familias en el país.
Señaló que, pese a la crisis que se vive por la pandemia y que impacta a todos los sectores, en la República Dominicana, existe la capacidad productiva para poder satisfacer la necesidad alimentaria del pueblo dominicano.
Dijo que el sector lo que necesita es más tecnología, acceder a los mercados en las condiciones en que se solicita internacionalmente, encontrar mejores mecanismos de distribución, pero que en esencia el sector tiene todas las condiciones para asegurarle al país que no habrá una hambruna ni una crisis alimentaria porque existe la capacidad productiva.
“En medio de la crisis, de la incertidumbre, de la angustia que genera la crisis, por lo menos existe la certeza de que lo único que falta es planificar con tiempo para garantizar la seguridad alimentaria”, dijo, al agregar que, ciertamente, ha podido reflexionar sobre la necesidad de que se haga una planificación para poder enfrentar cualquier eventualidad que pudiese presentarse.
Resaltó que es de vital importancia que por primera vez se aborde el tema de una potencial crisis alimentaria como consecuencia de una crisis sanitaria, ya que se ha analizado mucho la parte de la salud y la necesidad de contener la expansión del virus.
“Hemos visto el impacto económico: cierre de empresas, cierre de contratos de trabajo, disminución del ingreso, caída de la demanda y la oferta, pero no habíamos analizado el impacto en lo que tiene que ver con la producción de alimentos”, destacó Fernández.
Dijo que en lo inmediato se ha observado que la crisis produjo un impacto con el cierre de hoteles y restaurantes, y que mucha de esa producción estaba destinada a estos mercados.
Replicar modelo del Merca Santo Domingo
Aprovechó el desarrollo del conversatorio, para plantear la necesidad de replicar el modelo del centro de abasto Merca Santo Domingo en las regiones norte y sur, a fin de potencializar y estimular a los productores nacionales, asegurándoles la demanda de sus productos de la manera más inocua y sana posible para su consumo.
Dijo que el único punto luminoso para la economía dominicana ha sido la caída de los precios del barril de petróleo y el aumento de los precios del oro, que sirven de aliciente para el país en medio de la actual crisis que afecta a todo el mundo.
En el referido diálogo en el que participaron productores y exportadores agrícolas, expertos en el tema y catedráticos universitarios, coincidieron que la seguridad alimentaria en el país puede verse afectada seriamente si las autoridades gubernamentales no ponen la atención requerida a tan importante sector en medio de la actual crisis sanitaria y económica.
Sostuvieron que la soberanía alimentaria solo de consigue con la producción agrícola nacional, por lo que se debe defender y estimular a toda costa a los productores nacionales.
Argumentaron su temor de que, producto a la crisis, se produzca un bajo nivel de seguridad alimentaria en el país, sumado a la vulnerabilidad de un sector de la población, que por sus bajos ingresos podría terminar en una situación inmanejable para el gobierno dominicano.
Entre los participantes del diálogo se encontraban los productores René Columna Guzmán, Antonio Comprés, Raudy Cruz, Jorge Domínguez, Hugo González y Edgar Guzmán.
Asimismo, los catedráticos universitarios Antonio Ciriaco Cruz, Rafael Espinal, Pavel Isa y el representante de la FAO en el país, Héctor Mata.
