Abinader plantea cambio para impulsar competitividad y empleo

Santiago – El aspirante presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, declaró que para iniciar una verdadera estrategia de desarrollo integral, la República Dominicana tiene que concertar un plan que comprometa a los sectores público y privado en la articulación de programas y acciones que rebasen las declaraciones de intenciones y se conviertan en políticas públicas concretas.

“En los primeros dos años  de un gobierno que tenga claridad y determinación para hacerlo, podemos producir un gran cambio en términos de competitividad, generación de empleos y creación de riqueza social”, expresó.

Abinader advirtió que gran parte de la falta de competitividad y de los tropiezos en la creación de capital social del país se originan en la desarticulación existente entre los actores económicos, lo que en gran medida se ha debido a que los gobiernos no han cumplido su responsabilidad como entes facilitadores de las iniciativas productivas.

Al sostener ayer un conversatorio con directivos de la Asociación Para el Desarrollo de Santiago, Inc., APEDI, de quienes escuchó sus expectativas e ideas y ante los que expuso aspectos de su visión sobre la forma de hacer más eficiente la gestión pública, el economista y líder político precisó que República Dominicana no puede seguir administrada en base a decisiones oficiales aisladas y coyunturales.

Entre otros directivos de la APEDI estuvieron presentes Fernando Capellán, Félix García, Juan Manuel Ureña, María Victoria Minicuchi, Lina García, Sonia Guzmán, Juan Mera, Ricardo Fondeur, Rafael Sánchez, Juan Carlos Ortiz y Benito Ferreira, entre otros. Abinader estuvo acompañado por el diputado Víctor de Aza.

Afirmó que en el país hace tiempo que llegó la hora de estar introduciendo parches y medidas coyunturalistas frente a necesidades y déficits que sólo serán resueltos aplicando políticas de largo aliento.

Abinader sostuvo que el primer gran acuerdo debe producirse alrededor del Presupuesto Nacional que no debe ser confeccionado  en base  a decisiones unilaterales de los gobiernos sino escuchando las sugerencias de los actores fundamentales en los diferentes aspectos.

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