Rubén Maldonado, quien en agosto cumple 22 años como diputado, siente que su misión ha concluido.
“Hemos llegado a un nivel donde ya yo no tengo nada que darle y tampoco ella nada más que enseñarme… Lo que me queda es retirarme”, reflexiona desde la curul en la que ha representado a Santo Domingo Norte desde el año 2002.
“Yo le he dado a la Cámara de Diputados todo lo que puedo dar, más inclusive de lo que puedo dar, pero creo que hemos llegado a un nivel donde ya yo no tengo nada que darle y tampoco ella nada más que enseñarme… Lo que me queda es retirarme, dándole las gracias porque me ha dado todo, yéndome tranquilo, sabiendo que jugué roles importantes y que cumplí con mi deber. Me voy con mi honra bien elevada”, dijo.
Después de 22 años siendo diputado tanto por el PLD como en una ocasión con la Fuerza del Pueblo, Maldonado se despide de la curul en la que representaba a Santo Domingo Norte y le pasa la antorcha a su hijo Eudy Maldonado, quien será legislador en la misma demarcación. Los primeros años de Rubén Maldonado en la política se iniciaron cuando era aún adolescente.
A los 14 años fue secretario general de la Juventud Comunista (JC) en el Liceo Juan Pablo Duarte. Cuando cumplió 17, ya estudiaba en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y se unió a la Liga de la Juventud Democrática, una organización estudiantil de izquierda.
“Nunca me separé de lo que eran las inquietudes y del activismo político, me gustaba la política desde niño, eso realmente lo aprendí de un cuñado que era un activista de izquierda de ese entonces y de una u otra manera, pues influenció mucho en mí, en el amor a la lectura, siempre investigando, aprendiendo y conociendo sobre todo de la política”, dijo.
En 1995 se unió como miembro del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y cinco años después, en el 2000, pasó a ser integrante de su Comité Central. Aunque en un principio no se imaginó ni remotamente siendo candidato a diputado, poco a poco se fue materializando la idea y, según contó, a los residentes de Santo Domingo Norte les gustó su propuesta y en 2002 ganó el primero de cinco períodos legislativos.
“Es una historia que tiene mucho que ver con una infancia muy politizada, una infancia muy ligada a los movimientos estudiantiles, a la lucha del proletariado de los trabajadores de una u otra manera me involucré también en la conformación de diferentes sindicatos”, indicó.
Pero no lo ha hecho solo, contó que durante este proceso ha sido asistido por compañeros del partido, amigos y gente de la ciudadanía que lo han apoyado por años.
Ya a partir de ahí ha sido diputado de manera ininterrumpida. Aunque en 2010 se postuló a precandidato a alcalde de Santo Domingo Norte, no logró ganar en las elecciones internas del partido. Pese a esto, su partido le dio una candidatura que estaba reservada, y volvió a ganar como diputado.
“Me preparé para seguir en mi partido trabajando. Pero entonces el presidente Leonel Fernández me mandó a buscar, era presidente (de la República) en ese entonces, y me dice que todas las encuestas me daban como favorito, que era una de las figuras fundamentales del partido en la demarcación mía y que en consecuencia el PLD no podía prescindir de nosotros, que yo tenía que estar en la boleta”, explicó.
En su recorrido por la Cámara, también se convirtió en su presidente entre 2017 y 2018.
“Toda ambición de cualquier diputado es llegar a ser presidente de la Cámara, porque es la posición de mayor nivel de relevancia que tiene la Cámara de Diputados”, señaló.
Dijo que en solo un año pudo elaborar el plan que tenía, y que uno de sus mayores proyectos fue la remodelación de la Cámara de Diputados, con los recursos propios del presupuesto. Citó la remodelación de las áreas de recepción, de la financiera, de contabilidad y de protocolo.
“Esa recepción que está ahí no era así, la recepción de la Cámara de Diputados era un pasillo, la gente parada afuera, en la calle, en el sol… Ahora hay una recepción altamente moderna”, señaló.
Entre los proyectos que encabezó están el del Código Penal de República Dominicana, el que crea la Zona Especial de Desarrollo Integral Fronterizo y un régimen de incentivos; el que designa la avenida España con el nombre de Johnny Pacheco (boulevard Johnny Pacheco); el que regula los servicios de vigilancia y seguridad privada, el de Aduanas de República Dominicana, entre otros.
Uno que todavía no se ha aprobado, y que es el que más deseo tiene de que pase, es el proyecto de ley de Indulto, “que procura el indulto pero está concebido para pequeñas personas que realmente lo necesitan, que no haya sangre de por medio”. Mientras estuvo en el PLD vivió varias crisis como la del 2007, cuando Danilo Medina renunció a la Secretaría de la Presidencia y pasó a ser el precandidato a la presidencia que enfrentó al mandatario de la época, Leonel Fernández.
También la más agria de todas, la que los dividió y sacó del poder en el año 2020 y que dio paso a la formación de Fuerza del Pueblo, el partido verde que comanda el expresidente Leonel Fernández.
“Cuando tú presionas los acontecimientos históricos pasa lo que pasó en 2019, eso no debió pasar nunca. En término real, el Partido de la Liberación Dominicana unificado todavía debía estar en el poder, no había ninguna razón ni ninguna posibilidad de que ningún otro partido podría disputar con la posibilidad de mantenerlo en el poder. Pero cuando tú trastornas la historia y cuando tú le das una puñalada como se le dio a la democracia, y a la continuidad de la institución como fue que se le dio en octubre del 2019, entonces sucede lo que ha pasado, un descalabro total y de una u otra manera prácticamente borrar al PLD del escenario”, explicó Maldonado en una entrevista con Listín Diario.