Desde mediado de este 2020, la situación de hacinamiento en el Mercado Nuevo comenzó a cambiar, en parte empujada por la exigencia de distanciamiento e higiene impuesta por la pandemia, pero también por un plan del entonces alcalde David Collado de rescatar el más grande centro de abastos de productos agropecuarios.
En la tarea se unieron la autoridad municipal, el Gobierno, los cuerpos armados y la Presidencia. Se comenzó a trabajar y en poco tiempo se veían resultados: un mercado más limpio, con las calles céntricas desahogadas y la recuperación total de la avenida Duarte y su empalme con la Paseo de los Reyes Católicos.
Una de las luchas más constantes fue la de recuperar el área donde se estacionaban los vendedores mayoritarios de plátanos y en la parte del trébol que comunica con la avista Máximo Gómez, se logró, pero ya algunos comerciantes han regresado al lugar.
En la Duarte, desde el triángulo del lado oeste del mercado hasta la Paseo de los Reyes Católicos, la zona quedó totalmente libre de vendedores en la vía, pero ya comienzan a instalarse ofertantes de guineo.