El presidente Danilo Medina tiene de frente dos duros años de retos, especialmente en lo político, donde deberá que operar con paciencia de orfebre para salir de la mejor manera.
Uno de las principales amenazas es su propio Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en el que, en palabras de uno de los miembros del Comité Político y fundador del partido, como es Franklin Almeyda, el sector del expresidente Leonel Fernández ha asumido el papel que la oposición abandonó.
En ese partido tendrá el reto de que se apruebe su propuesta de que se hagan las primarias internas con el padrón abierto de la Junta Central Electoral.
Este proceso debe librarlo sin que la unidad del PLD salga lesionada, pues Fernández es un fiero opositor a ese modelo.
El horno del PLD está que arde y la carrera presidencial apenas comienza este domingo con el lanzamiento “por todo lo alto” de la precandidatura presidencial de Fernández, cuyo equipo político promete impactar con la presentación de alrededor de un millón 200 mil personas registradas en una plataforma digital.
Además de la maquinaria política que impulsa al expresidente Fernández, hay otros dirigentes peledeístas con aspiraciones presidenciales que son Reinaldo Pared Pérez, Francisco Domínguez Brito, Carlos Amarante Baret, Temístocles Montás y Manuel Crespo.
Amarante, Pared, Domínguez y Montás están ubicados dentro de la parcela política de Medina, por lo que sus proyectos dependen mucho de hacia dónde gire Medina.
Otro que está bajo la sombrilla del danilismo es el ministro de Educación, Andrés Navarro, quien ha dicho que dejará el cargo para dedicarse a su proyecto político de lleno cuando su partido abra la precampaña.
Medina recibe al mismo tiempo las presiones de sus allegados para que movilice nuevamente a su poderosa corriente política a los fines de allanar el camino en busca de una segunda reelección y un tercer período consecutivo.
Manejar esa tentación y presiones será una de las tareas más importantes para Medina, que al asumir la pasada candidatura presidencial del PLD aseguró que esa sería la última.