El canciller Roberto Álvarez reiteró este martes que el Gobierno dominicano favorece en Venezuela un proceso electoral “justo, libre y transparente”, fruto de una salida “negociada” a la crisis en ese país.
El alto cargo se expresó en esos términos durante la sexta Reunión Ministerial del Grupo de Contacto Internacional (GCI) sobre Venezuela, la primera vez que el país participa en ese foro desde que se unió como miembro en octubre pasado.
“Entendemos que todas las partes venezolanas deben abocarse a un diálogo nacional, sincero, amplio, inclusivo, creíble y respetuoso, que contribuya a una solución pacífica de la profunda crisis que vive esa nación”, expresó Álvarez a través de un documento servido por la Cancillería.
El Gobierno dominicano no reconoce a la Asamblea Nacional afín al presidente venezolano, Nicolás Maduro, instalada el 5 de enero pasado, pero tampoco lo hace con Juan Guaidó, a quien reconocía como jefe de Estado interino del país suramericano.
Durante el encuentro, que se desarrolló de manera virtual, el CGI difundió un documento desde Bruselas en el que pidió a los partidos de oposición venezolanos unirse para avanzar hacia “un mayor diálogo” y recordó que la única manera de salir de la crisis que vive el país es reanudar las negociaciones políticas.
Los participantes en el grupo creen que la designación de un Consejo Nacional Electoral independiente y equilibrado será una parte fundamental en ese proceso.
Ayudará, señalan, a “eliminar todos los obstáculos a la participación política para que se lleven a cabo procesos electorales. No puede haber democracia sin el compromiso de todos los partidos de respetar las reglas electorales básicas y el papel imparcial del CNE”.
El grupo insistió, por otra parte, en que “todos los presos políticos deben ser puestos en libertad de forma inmediata e incondicional” y pidió el fin del arresto domiciliario.
“La intimidación y las represalias continuas contra los actores políticos agravan aún más la crisis, creando más obstáculos para el retorno pacífico a la democracia y el Estado de derecho”, dijo el GCI.