A partir de enero de 2025, los productores dominicanos deberán cumplir con requisitos de transparencia y trazabilidad para continuar exportando al mercado europeo. Esto se debe a una nueva regulación de la Unión Europea que prohíbe la importación de productos asociados con la deforestación. Aunque esta medida podría suponer un desafío para países en desarrollo, la embajadora de la Unión Europea en República Dominicana, Katja Afheldt, aseguró que el país no enfrenta riesgos significativos en este ámbito.
Afheldt explicó que República Dominicana está preparada para cumplir con la normativa, destacando que la nación caribeña es un ejemplo en la producción de banano orgánico. Recordó que hace 15 años, los países de África, el Caribe y el Pacífico (ACP) contaban con preferencias comerciales para la exportación de banano a Europa. Sin embargo, tras ajustes impulsados por la Organización Mundial del Comercio (OMC), decidió que la protección era contra las reglas.
Entiende que el país logró ser un ejemplo de una adaptación muy exitosa posicionándose como el principal proveedor de banano orgánico para el mercado europeo. No obstante, entiende que se deben apoyar a las pequeñas y medianas empresas.
La embajadora también resaltó el avance del cacao orgánico, un sector que cuenta con el apoyo de programas como Cacao Trace, financiado por la UE, que beneficia principalmente a pequeños productores.
Para Afheldt, proteger la naturaleza es una prioridad, ya que no solo garantiza la sostenibilidad del comercio, sino también el crecimiento del turismo, un pilar económico del país. “La naturaleza es fundamental porque las personas vienen aquí por las playas. Estas medidas no son solo para acceder al mercado europeo, sino también para el beneficio interno del país”, afirmó.
En cuanto a otros productos agropecuarios, Afheldt admitió que la UE había restringido la entrada de berenjenas y habichuelas por residuos de pesticidas. No obstante, aseguró que esta situación ha mejorado gracias a proyectos financiados por la UE para fortalecer los laboratorios locales. “Ahora, las exportaciones de berenjenas no están limitadas. Estas medidas también benefician a los consumidores dominicanos, ya que garantizan alimentos libres de contaminantes”, explicó.
La embajadora enfatizó el potencial del país para diversificar y ampliar sus exportaciones hacia Europa, un mercado que valora productos sostenibles y de alta calidad. “República Dominicana no solo exporta cacao, sino que produce chocolate de altísima calidad. Esto representa una gran ventaja competitiva”, subrayó.
Además, destacó que las pequeñas y medianas empresas tienen mayor capacidad para adaptarse rápidamente a las exigencias del mercado europeo en comparación con grandes productores de centroamericanos.
En términos de comercio bilateral, Afheldt afirmó que la UE es el segundo socio comercial de República Dominicana y valoró el esfuerzo del país por posicionarse como un Hub logístico regional. Según la diplomática, las relaciones comerciales entre ambas partes están en un buen momento y existe interés por profundizarlas. “La Unión Europea está comprometida a mantener el comercio con socios clave como República Dominicana, promoviendo condiciones justas y sostenibles”, sostuvo.