El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado, afirmó que el gobierno debe dar una respuesta institucional a la declaración de la comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, en relación al agravamiento de la crisis en Haití.
Bachelet exhortó a “sumar voces para reclamar la atención de las grandes naciones por el deterioro de la crisis en Haití y la creciente ola de crímenes y secuestros que ponen en riesgo la seguridad en la isla y en la región con las bandas que operan allí”.
En ese sentido, Vargas demandó que el Gobierno coincida con la expresidenta chilena, «en concordancia con la constante demanda de que la comunidad internacional se interese por la situación de crisis general y de guerra civil en la vecina nación».
A través de un documento de la Comisión de Políticas Públicas del PRD, el excanciller criticó el manejo gubernamental dado al tema haitiano.
Vargas calificó como “inexplicable e irresponsable el silencio desde el Gobierno ante este llamado de la comisionada de la ONU para los Derechos Humanos”.
“Este es un momento oportuno para que el gobierno dominicano se sume a la causa iniciada por la expresidenta Bachelet para que la comunidad internacional, en especial las principales potencias de Occidente, asuman la responsabilidad de acompañar a Haití a salir del colapso institucional y el agravamiento de la crisis en que está sumida”, expresó.
Instó a ir más allá de una verja en la frontera y fomentar el desarrollo fronterizo.
El presidente del PRD también criticó que el gobierno del presidente Luis Abinader «reduzca su política frente a Haití a la construcción de una verja perimetral».
El excanciller dominicano sostuvo que un tema tan complejo como este requiere una estrategia integral que incluya una política migratoria eficaz y respetuosa de los derechos humanos para evitar episodios lamentables como el ocurrido recientemente en el complejo residencial Ciudad Juan Bosch.
De igual modo, reiteró que se debe contemplar el incentivo al desarrollo fronterizo a través de proyectos como la Iniciativa de Laredo, “diseñada durante nuestra gestión en Cancillería, que estipula un ambicioso paquete de inversión extranjera en la zona para promover el comercio y la creación de empleos”.